La Renault Kangoo nació en Europa en 1997. Anticipado por el concept Pangea, llegó para reemplazar al utilitario Express (basado en la plataforma del R5) y competir con la flamante dupla de sus rivales franceses compuesta por los Berlingo y Partner.

En el mercado argentino debutó a fines de 1998 con la versión Break importada de Francia. En abril de 1999 comenzó su producción en la planta de Santa Isabel junto con la opción utilitaria. Ambas ofrecían la puerta lateral corrediza, un faltante en sus rivales.

El Kangoo francés tenía en motor 1.4 de 75 CV, pero el nacional adoptó el 1.6 de 90 CV, junto al 1.9 diesel de 65 CV. Luego se agregaron el 1.2 de 75 CV como entrada de gama, el 1.6 pasó a ofrecer 95 CV y llegó la opción a GNC con la preinstalación realizada en la planta de Santa Isabel.

Para mantener vigente al Kangoo original (que ya contaba con una nueva generación en Europa), el modelo nacional adoptó un rediseño en 2008 que estrenaba el turbodiesel 1.5 de 65 CV y una opción de siete asientos de desarrollo local. Luego llegó la versión de cinco plazas para el Express y en 2013 debutó un segundo rediseño.

A 20 años de su llegada al mercado argentino, la Kangoo estrenó su segunda generación (basada en el Dacia Dokker), al tiempo que también desembarcaba la versión eléctrica importada de Francia.

La nueva Kangoo nacional adoptó nuevos motores (1.6 de 114 CV y 1.5 turbodiesel de 89 CV), manteniendo la amplia gama de versiones con la opción familiar y la utilitaria, con dos o cinco asientos (ver prueba).

Con más de 450.000 unidades fabricadas en la planta de Santa Isabel, la Kangoo se ha convertido en uno de los íconos de nuestro mercado. Su último logro fue traspasar las fronteras del continente (algo reservado a muy pocos modelos argentinos en la historia) y ser exportado al mercado de Argelia (ver mas).