Desde que existe el Mercosur, el principal destino de los automóviles producidos en la Argentina era Brasil y viceversa. Pero debido a las restricciones que aplicó el gobierno nacional, ahora México es el principal destino de los automóviles brasileños.

Las ventas de automóviles fabricados en el país vecino que llegan a México se incrementó en el último año el 89 por ciento, en un marco donde el total de los envíos brasileños vienen cayendo un 11 por ciento en comparación con el año pasado.

En esos números negativos mucho tiene que ver nuestro mercado, donde los modelos brasileños cayeron del 34 al 28 por ciento de participación en este año.

Para Brasil, la caída de envíos a la Argentina representó una baja del 3 por ciento, a lo que se suma el reciente impuesto a los modelos importados aplicado por el gobierno de Alberto Fernández.

“Este impuesto a la importación disfrazado con otro nombre es una flagrante violación del acuerdo bilateral”, dijo el presidente de Anfavea, Marcio de Lima Leite. “Tenemos que asegurar que el acuerdo se cumpla y sirva de estímulo para ambos países. Este es un problema de competitividad, seguridad jurídica y previsibilidad”, completó el directivo.

En otros mercados sudamericanos, Brasil perdió mucho terreno por la baja de las ventas. En Colombia, donde el mercado cayó el 29 por ciento, la exportación de autos brasileños se redujo 42 por ciento, mientras que en Chile, con un mercado 30 por ciento menor, los envíos cayeron 61 por ciento.