Cuando PSA se hizo cargo de Opel, se podía vislumbrar en el futuro un drástico cambio de la gama actual debido a las permanentes pérdidas de la ex General Motors.

Y eso se empezó a conocer hoy a través de un anuncio de la nueva directiva de la marca alemana. Los Adam, Karl y Cascada dejarán de venderse el año próximo.

El Adam es un pequeño modelo que nació para dar batalla al Fiat 500 y el Karl es un clon del Chevrolet Spark, de un tamaño similar al primero, pero con cinco puertas. Ambos podrían tener un sucesor común si Opel es sumada a una hipotética nueva generación de los Peugeot 108 y Citroën C1 (que hoy comparten carrocería con el Toyota Aygo).

Por su parte, el Cascada es un cabrio basado en la plataforma del Astra que también es vendido en los Estados Unidos con la marca Buick. Por su parte, nada se ha hablado del Ampera-e, que pese a ser un clon del Chevrolet Bolt, podría continuar a la venta.

Las novedades vienen de la mano del nuevo Corsa (apoyado en la nueva plataforma modular del grupo), el nuevo Mokka (dejando de lado el estilo Tracker del actual) que tendrá un diseño inspirado en el concept GT X (ver nota) y también una nueva generación del Vivaro (que actualmente es un clon del Renault Trafic).

Entre las demás novedades se anuncian los eléctricos para esos mismos modelos, la renovación del Insignia y un signo de interrogación sobre el futuro del Astra (que también debería pasar, si sobrevive, a la plataforma modular).

¿Los veremos en la Argentina? La intención de PSA es traer a la marca alemana únicamente con producción Mercosur, algo que no ocurrirá en el corto plazo. La idea de traer modelos importados corre, por ahora, por cuenta de DS y el desarrollo de su gama, con lo cual para ver un Opel nuevamente en nuestras calles parece que falta mucho.