General Motors anunció el cierre inmediato de la planta colombiana de Colmotores y en agosto próximo la ecuatoriana de OBB, en el marco de una restructuración del negocio en ambos países.

La planta colombiana, que funcionaba desde hace casi 70 años, estaba produciendo el Chevrolet Joy (/a vieja generación del Onix) que llegaba a la Argentina.

La filia local confirmó que el modelo dejará de comercializarse tan pronto como termine el stock actual en el país. Como ACARA no discrimina entre las ventas de Joy y Onix, no se sabe cuánto estaba vendiendo el modelo actualmente, pero las ventas ya eran bajas.

La novedad en Colombia y Ecuador responde, básicamente, a la creciente competencia de productos chinos (de los cuales GM también tiene su producción) gracias a nuevos acuerdos para ingresar a estos mercados.

De hecho, las plantas de Colombia y Ecuador venían funcionando al 9 y 13%, respectivamente, de su capacidad productiva. En la de Ecuador se montaba un clon de la Isuzu D-Max con marca Chevrolet.

La situación, aunque desafiante, es bien diferente en la planta de Alvear, que esta semana retoma su actividad productiva tras un nuevo parate a causa de la falta de piezas. Allí se produce la Tracker, la cual se destina a nuestro mercado y a otros de exportación, donde justamente está Colombia.