Así como en la actualidad los Onix y Prisma rediseñados (lanzados en 2016) conviven con los originales (presentados en 2103), la nueva generación podría hacer lo mismo con el que actualmente se comercializa.

Todo parece indicar que de ser así, la actual línea Joy será discontinuada y los rediseñados pasarán a llevar esa denominación una vez que salga el nuevo modelo, que estará basado en la plataforma modular GEM.

Eso dice el portal brasileño Motor1., según fuentes ligadas a General Motors de Brasil. La información suena bastante lógica ya que tanto el hatch como el sedán serán más grandes que los actuales y llevarán un equipamiento mejorado con, por ejemplo, ESP de serie.

Esto es algo que ya varias marcas ofrecen: Fiat, pese a que discontinuó a los Palio y Grand Siena, posicionó por encima a los Argo y Cronos (también como reemplazo de Punto y Linea), Ford lo hace con Ka y Fiesta, Toyota con Etios y Yaris y Volkswagen con Gol/Voyage y Polo/Virtus.

En Chevrolet, la política de una doble oferta se llevó a cabo en Brasil y Argentina en la carrocería sedán con el Cobalt, mientras que únicamente en la Argentina, el Sonic (tanto hatch como sedán), se ubicaba como el modelo de prestigio en el segmento B.

Esta decisión podría hacer que el Cobalt no tenga un sucesor, pese a lo que se especuló inicialmente, ya que con el crecimiento del tricuerpo, prácticamente no quedaría lugar entre este y el Cruze de tres volúmenes como para la existencia de otro modelo.