El rediseñado Volkswagen Vento, modelo que se había testeado por última vez en 2019, previo al ingreso del actual protocolo de Latin NCAP, fue evaluado por el organismo de seguridad latinoamericano.

El resultado no trajo sorpresas y fue calificado con cinco estrellas. La protección a adultos logró 87%, la de niños 90%, la de peatones 73% y la de asistencias 91%.

Por tratarse de un rediseño, el organismo mantuvo los criterios en los choques frontal y lateral y realizó nuevas pruebas en protección de peatones y ayudas a la conducción (ofrece frenado autónomo).

Más allá del buen resultado, el modelo fue criticado porque en el impacto lateral se abrió la puerta delantera, en la protección a la pelvis en los atropellos y en el desempeño del ESP.