Prueba: Chevrolet Cruze 5 Premier

  • DISEÑO
  • HABITABILIDAD / CONFORT
  • PRESTACIONES / MOTOR
  • COMPORTAMIENTO
  • SEGURIDAD
  • PRECIO / COMPETENCIA
  • EQUIPAMIENTO

Chevrolet Cruze 5 Premier

- Precio $2.718.900
- Potencia 153 CV
- Aceleración 0 a 100 km/h 8,5 seg.
- Consumo promedio 8,9/100 km

La versión bicuerpo del Cruze nacional es una de las pocas opciones que queda en el segmento. Buen motor y comportamiento equilibrado.

Texto y fotos: Martín Simacourbe

Pese a que la segunda generación del Cruze se lanzó hace cinco años (el hatch se agregó unos meses más tarde), nunca lo habíamos probado en AutoWeb.

Esta segunda camada, producida en la Argentina, remplazó a la que venía de Corea (ver prueba), en tiempos en que la marca ofrecía buena parte de su gama (Spark, Aveo, Sonic, Captiva y el propio Cruze) diseñada por la ex Daewoo.

La planta de Alvear quedó hoy como la única que lo produce a nivel mundial, luego de que fuera discontinuado en las fabricas de América del Norte y Corea.

El futuro del modelo en la región es incierto. Por un lado, Brasil, su mayor mercado de exportación, lo pide cada vez menos; pero por el otro, gracias a las necesidades de mejorar la balanza comercial, su éxito en el mercado interno creció mucho en los últimos tiempos.

Se sabe que General Motors pronto producirá un nuevo modelo en Alvear, pero en principio la idea es que conviva con el Cruze. ¿Cuánto tiempo? No lo sabemos.

La gama del mediano comprende seis opciones, con tres equipamientos, un motor y dos cajas para las carrocerías de cuatro y cinco puertas, que se diferencian únicamente en el remate posterior.


DISEÑO/ESTILO

El segmento de los hatch medianos casi se quedó sin exponentes en la Argentina. Con el reciente adiós del VW Golf y el incierto futuro del Peugeot 308, el Cruze aun resiste el embate de los SUV.

Y uno de sus argumentos es el diseño, con el estilo clásico de este tipo de modelos: techo bajo, cola trunca y medidas compactas si se lo planta ante el sedán (es 22 cm más corto manteniendo la distancia entres ejes).

En los últimos tiempos, General Motors modificó las trompas, que antes eran diferentes entre hatch y sedán y ahora son personalizadas según la versión y no por la carrocería.

El Premier que probamos tiene un formato propio en los faros antiniebla, parrilla cromada y llantas diamantadas. El resto es idéntico al modelo que se lanzó en 2016.


INTERIOR/CONFORT

Lo que más llama la atención al abrir las puertas es el tapizado en marrón con esa tonalidad de filtro de cigarrillo que se repite en buena parte de la plancha y las contrapuertas que le queda muy bien, al menos como elemento diferenciador.

El estilo, diseño y calidad son los mismos de siempre. Y aunque no ofrece plásticos blandos (disimulados por esa cobertura símil cuero), la terminación, salvo algunos plásticos puntuales, está bien lograda.

Algo que destaca es la excelente postura al volante, algo que lo diferencia de los SUV que se plantaron como el peor de los enemigos de este segmento. Hay buenas regulaciones y la butaca contiene muy bien al cuerpo.

Hay quienes valoran viajar con una vista más panorámica, pero si sos de los míos, el Cruze es de lo mejor que vas a encontrar en el segmento (ahí sumamos a sedanes como Corolla, Sentra o Vento).

Todo está donde tiene que estar, con un tablero bastante completo (la pantalla central no es de las mejores y la precisión del velocímetro es flojísima), un sistema multimedia que fue mejorando con el tiempo (la cámara es muy buena) y un climatizador de fácil operación.

El equipamiento es abundante, con varios extras como cargador inalámbrico (a diferencia de los más nuevos, donde simplemente se apoya el teléfono, ofrece una cuna vertical entre los asientos), techo corredizo, butaca eléctrica, estacionamiento asistido, conexión wifi y OnStar.

Atrás hay un espacio lógico teniendo en cuenta que es un hatch. Hay buen lugar para dos pasajeros y un eventual tercer ocupante, pero la quinta plaza no es muy cómoda.

El baúl no es muy espacioso, con apenas 290 litros, una cifra que varios SUV compactos superan, pero si querés más lugar está la oferta del sedán. Por debajo, aparece la clásica rueda de auxilio temporal.


MOTOR/PRESTACIONES

Algo elogiable de la gama del Cruze es que siempre ofreció un único motor (a diferencia de casi todos los otros medianos) que permitía (y permite) subirse a una entrada de gama con un propulsor moderno, potente y eficiente.

Se trata del 1.4 turbo de 153 CV que siempre se destacó por un buen funcionamiento, con buena salida desde abajo, un torque suficiente para llevarlo cómodamente en cualquier circunstancia y potencia a la hora de sacarle el máximo jugo.

Las prestaciones son muy buenas, dignas de una versión deportiva, con menos de 9 segundos para acelerar hasta 100 km/h y menos de seis para recuperar de 80 a 120 km/h.

La caja es una automática convencional de seis marchas con manejo secuencial pero sin la posibilidad de hacerlo a través de unas levas al volante.

Los consumo también hablan de la eficiencia del motor turbo aunque, por ejemplo, son apenas más altos que los del Sentra 2.0, que hace gala de muy buenos valores.

Gasta poco más de 6 l/100 km en ruta, casi 8 en autopistas y se estira algo más, casi 11, en ciclos urbanos, siendo este el número más criticable. El tanque de 50 litros queda justo.


COMPORTAMIENTO

Si algo caracteriza a los últimos productos de GM en términos dinámicos es el equilibrio, partiendo de una base alta, tanto en desempeño en ruta como en el confort de marcha. Y ese estándar se dio a partir de la llegada de este Cruze (luego siguió con los nuevos Equinox, Onix y Tracker).

El Cruze hace gala de un gran comportamiento a todo momento, sin por ello ser el mejor en cada rubro. Las suspensiones están orientadas a brindar un excelente andar, pero sí se lo exige responde muy bien, aunque sin llegar al nivel de eficacia que tenía un Golf o un Focus.

Y en la ciudad también se siente a gusto, pese a que los neumáticos tienen un perfil reducido y que el despeje delantero exige estar atento ante algunas cunetas de las muchas que proliferan en la Argentina.

La dirección es una de las aliadas en ese buen desempeño, con una correcta asistencia en el día a día y una dureza y velocidad en la maniobra que ayudan a tomar curvas con velocidad y precisión.

Como decíamos, el poder del eficiente 1.4 turbo está siempre disponible (245 Nm a solo 2.000 rpm) y a velocidades crucero circula a muy bajas vueltas, favoreciendo el consumo.


SEGURIDAD

El Cruze sumó en 2019, con la llegada de la versión Premier, el frenado autónomo de emergencia, que también detecta peatones. Eso se sumó al mantenimiento de carril, elementos que ofrece únicamente en la versión tope de gama.

El sistema de mantenimiento cumple su función principal (la de impedir que ocupemos otro carril), pero no es tan eficiente como algunos que vinieron después, ya que va “chocando” contra las líneas en un vaivén infinito hasta que no se toma intervención.

Estos dispositivos se suman a la seis bolsas de aire (algo que sí mejoró en las versiones básicas con el tiempo), el control de estabilidad, el alerta de punto ciego, las luces altas automáticas y el extra que brinda el sistema OnStar.

La frenada está en un buen nivel, aunque sin brillar, ya que orilló los 40 metros, siendo que algunos productos Mercosur ya están bajando esa cifra (incluso sin los cuatro discos que ofrece el Cruze).

En las pruebas de Latin NCAP logró (en 2019) cinco estrellas para adultos y cuatro para niños, ya con una unidad con seis airbags (en 2018 logró cuatro en adultos con una con cuatro bolsas).


PRECIO/COMPETENCIA

Llegamos al punto sensible, porque como muchos otros modelos, el Cruze tiene un precio de lista que difícilmente se pueda conseguir en las concesionarias, producto de su cercanía al impuesto interno.

Hoy, entre el base y el full hay apenas 250.000 pesos de diferencia, menos del 10 por ciento de lo que vale el Cruze 5 Premier que probamos: 2.718.900 pesos.

En la práctica, se piden más de 3 millones, precio que ya tienen la mayoría de los SUV compactos en la Argentina, incluso en Tracker full, que siempre convivió con el Cruze en cuanto a precios.

La cuestión, más allá de los pesos, es saber bien lo que se quiere: el Cruze es un excelente producto, un oasis en medio de este avalancha de SUV que nos recuerda todo lo bueno que eran (y siguen siendo) las berlinas medianas. Y si los sedanes te parecen aburridos, el Cruze 5 es directamente (con el 308) la aguja del pajar.

Hasta hace unos meses, la balanza indicaba que los SUV compactos, por las razones que fueran que valoran los cientes (posición de manejo, modernidad, diseño, etc.) le estaban ganando la pulseada, con comodidad, a modelos como el Cruze.

Pero con la nueva política de potenciar la producción nacional, el mediano de Chevrolet está viviendo un veranito que le permite alcanzar buenas ventas y discutirle al Corolla la cima del segmento. Si eso es suficiente como para garantizar una producción a largo plazo, es algo que solo General Motors sabe.


Lo Bueno

Motorización y prestaciones
Diseño atractivo
Comportamiento general
Equipamiento de seguridad
Posición de manejo

Lo Malo

Sin levas al volante
Despeje complicado
Quinta plaza
Baúl reducido
Auxilio temporal


FICHA TECNICA

Motor
Naftero, 4 cilindros, 16 válvulas
Cilindrada: 1.399 cm3
Alimentación: nafta
Potencia: 153 CV a 5.000 rpm
Torque: 245 Nm a 2.000 rpm

Transimisión
Caja: Automática de seis marchas
Tracción: delantera
Frenos: discos ventilado/disco

Tren de rodaje
Suspensiones: McPherson/Semi independiente
Dirección: Con asistencia eléctrica
Neumáticos: 215/50 x 17″

Dimensiones y Capacidades
Largo/Ancho/Alto: 4,448/1,807/1,484 m
Peso: sin datos
Baúl: 290 litros
Tanque: 50 litros

EQUIPAMIENTO DE CONFORT
Acceso y arranque sin llave
Butaca con regulación elećtrica
Cargador inalámbrico de celulares
Climatizador
Conexión Wifi
Control crucero
Encendido automático de luces
Estacionamiento asistido
Llantas de aleación
Pantalla táctil con cámara
Sensor de estacionamiento del/tras
Sensor de lluvia
Sistema OnStar
Tapizado de cuero
Techo corredizo
Volante regulable en altura y profundidad

EQUIPAMIENTO DE SEGURIDAD
Airbags frontales, laterales y de cortina
Alerta de punto ciego
Apoyacabezas (5)
Cinturones inerciales (5)
Faros antiniebla delantero
Frenado autónomo de emergencia
Ganchos Isofix
Luces altas automáticas
Mantenimiento de carril

PRESTACIONES

Aceleraciones
0-100 km/h: 8,5 s
0-400 metros: 16,3 s
0-1000 metros: 29,9 s

Recuperaciones
80-120 km/h en D: 5,7 s

Frenada
100-0 km/h: 40,2 m
140-0 km/h: 77,9 m

Consumo
100 km/h: 6,3 l/100 km
130 km/h: 7,7 l/100 km
Urbano: 10,7 l/100 km

12 comentarios
Martín Simacourbe
ADMINISTRATOR
PERFIL

Noticias Relacionadas

Dejá un comentario

Tu email no será publicado. Los campos marcados con * son obligatorios.

12 Comments

  • Ezequiel
    24 mayo, 2021, 3:20 pm

    Autazo, ojalá lo pueda tener algún día.

    RESPONDER
  • Sergio
    24 mayo, 2021, 8:28 pm

    Un excelente auto. Para mi el sedán por el tema del baul

    RESPONDER
  • Adolfo
    25 mayo, 2021, 3:56 pm

    Pensar que hay gente que compra un SUV del segmento B en vez de este auto. En fin, cosas que nunca voy a entender.

    RESPONDER
  • Gonzalo
    26 mayo, 2021, 6:38 am

    Que buen auto! Diseño, seguridad, calidad, equipamiento, un 7,6 en la evaluación no refleja lo bueno que es. Para mí es un 8. Igual prefiero el 3 volúmenes

    RESPONDER
  • Andres
    26 mayo, 2021, 9:04 am

    Buen motor, pero feo y caro..

    RESPONDER
    • Gonzalo@Andres
      26 mayo, 2021, 12:04 pm

      Te parece caro? Sale menos que un nivus y lo supera en todo!

      RESPONDER