Elegimos la mejor opción de menor equipamiento entre los hatch, sedán, furgón, SUV y pick up compacto y entre los sedán, SUV y pick up mediano.
Por Martín Simacourbe
Cuando las marcas publicitan un modelo o incluso cuando nos prestan sus lanzamientos (en el 90% de los casos), utilizan las versiones tope de gama, algo lógico teniendo en cuenta que son las más atractivas, tanto para el público como para nosotros, que tenemos más de qué hablar en cuanto a equipamientos o nuevos motores.
Pero como en AutoWeb también nos gusta mucho hablar de mercado, no le hacemos ascos a las versiones más peladas, porque podemos escribir sobre posicionamiento, rivales y cómo van mejorando.
El tema es que, como decíamos antes, las marcas pocas veces nos prestan estas versiones (de hecho, solo manejamos una de las ocho que integran el informe). Así que la hicimos fácil: como en realidad sí manejamos todos los motores, nos animamos a buscar las mejores versiones base en varios segmentos.
Algunas se destacan justamente por su motorización, otras por su equipamiento, y otras por el estilo o por algo que lo diferencian de las otras propuestas.
Para elegirlos hemos tomado en cuenta, preferentemente, aquellos modelos que cuenten con al menos tres versiones (una base, una intermedia y una full), pero es algo que no siempre se consigue. Sin más, nuestros ocho elegidos.
Hatch compacto: Volkswagen Polo Track
En el segmento de los hatch chicos quedaron únicamente los Joy, Onix, C3, 208, Sandero, Yaris y Polo, todos con alguna opción básica. Entre todos ellos destacamos al Polo Track, en el que Volkswagen se preocupó de ponerle un toque distintivo al diseño, como las llantas oscuras (con tazas, porque no deja de ser un base), algo clave en un vehículo buscado por el público joven. Igual no es su única virtud: el motor es algo antiguo, pero potente (1.6 de 110 CV) y se lleva muy bien con la caja manual de cinco y el andar general del modelo. En equipamiento ofrece cuatro airbags (los hay con 6 y 7, pero también con 2).
Sedán compacto: Nissan Versa Sense
Con un base en la gama, entre los sedanes chicos hay seis opciones: Joy Plus, Onix Plus, Cronos, Versa, Logan y Virtus. Nos quedamos con el modelo producido en México, básicamente porque es el único compacto de entrada de gama (de todas las carrocerías) en brindar frenado autónomo, sin olvidar seis airbags, un motor destacado (1.6 de 120 CV), gran terminación, un baúl lógico y un correcto desempeño. Todo con un diseño que es de los más logrados entre sus rivales.
Furgón compacto: Renault Kangoo Express
No son muchas las opciones con las que cuenta quien tiene al vehículo con compañero de trabajo. Los clásicos rivales franceses de la Kangoo son las antiquísimas Berlingo y Partner, mientras que la Fiorino, si bien es bastante más económica, recurre al viejo sistema de separar la cabina de la zona de carga. Además, el modelo cordobés es el único en tener más de una opción en la gama. Le suma una plataforma moderna, con lo que entrega mayor espacio interior, sin olvidar un motor probado como el 1.6 de 114 CV.
SUV compacto: Chevrolet Tracker MT
Acá sí que la oferta crece y mucho, más si incluimos hatch con espíritu aventurero como Tiggo 2, Pulse, Sandero o Nivus. Esos se agregan a los Tiggo 4, C4 Cactus, Renegade, Kicks, Duster y T-Cross (entre los que tienen una gama completa). Destacamos al producto nacional de GM por entregar un motor turbo ya desde la versión de acceso, algo que solo dan los VW, pero con 37 CV menos. La Tracker ofrece el 1.2 de 132 CV (con caja manual o automática), seis airbags y buen espacio interior. Eso sí, el equipamiento de confort no es su fuerte.
Pick up compacta: Fiat Toro Freedom
Si descartamos las Strada y Saveiro (tentadoras en precio, pero mucho más chicas), nos quedan Montana, Maverick, Toro y Oroch. Y con una opción base solo están estas últimas dos, con una clara diferencia a favor de la Fiat por los siete airbags, mejor calidad interior y un motor más potente (1.8 de 130 CV). La Maverick de entrada (en realidad una intermedia) también es tentadora porque dobla en potencia a la Toro, pero con un precio y un consumo mayor, cosas de las que reniega quien está buscando un modelo básico.
Sedán mediano: Toyota Corolla XLi
Otra oferta reducida en este segmento, solo con los Cruze, Sentra y Corolla (Cerato y Vento no tienen básico). Y aunque son tres buenas opciones (el Cruze el único con 5 puertas, pero en fin de vida), el Corolla hace gala de un equipamiento muy completo (con todas las ayudas a la conducción), un motor 2.0 de 170 CV, la confiabilidad que durante tantos años ha acompañado al modelo y un precio, al menos de lista, que es imbatible. A cambio, el equipamiento de confort tiene algunos faltantes, pero comprensibles en una entrada de gama.
SUV mediano: Jeep Compass
Este segmento también tiene muchísimas opciones, pero la mayoría apenas trae una versión. Con dos están Bronco Sport, Territory, ZR-V y Taos y con una verdadera entrada de gama, únicamente Compass y Corolla Cross. La diferencia en precio es fuerte en favor del Toyota, pero como está al borde del impuesto, entendemos que en los papeles la brecha no es tan amplia. El modelo de Jeep ofrece más prestigio y calidad y viene de serie con el motor turbo 1.3 de 175 CV. Carece de ayudas a la conducción, pero también es un faltante en el Corolla Cross. Quizás con el rediseño (ver más) las sume y nuestra elección deba cambiar.
Pick up mediana: Ford Ranger XL
Las seis pick ups regionales (S10, Ranger, Frontier, Alaskan, Hilux, Amarok) tienen una extensa gama con versiones básicas, intermedias y full. La S10 destaca por ser la única que mantiene el motor potente en la base (2.8 de 200 CV), pero está muy pronta su necesaria renovación (ver más). Además, la Ranger de entrada tiene un nuevo motor 2.0 con 170 CV, un diseño más moderno y el equipamiento de confort más completo entre sus competidoras, con pantalla táctil, control crucero, volante de doble regulación, encendido automático de luces y también el pack eléctrico, que solo traen Frontier y Amarok.
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