Primer contacto: Renault Logan Privilége

Primer contacto: Renault Logan Privilége

Nos subimos por primera vez al nuevo sedán compacto del rombo, que estrenó diseño y mantiene muchas características del modelo precedente.

El evento de lanzamiento del nuevo Renault Logan, llevado a cabo en la ciudad de Mar del Plata, fue el escenario apropiado para que la prensa especializada tomara contacto por primera vez con el nuevo sedán compacto producido en Brasil. Aquí, nuestras primeras impresiones, a la espera del test en el cual ofreceremos las cifras de prestaciones y un análisis más exhaustivo.

Renault Argentina puso a disposición de AW una unidad con equipamiento Privilege (la segunda más completa de la gama, luego de la Privilege Plus, que suma tapizados de cuero) con motor 1.6/16v de 105 CV, el más potente de la gama, que también ofrece el 1.6/8v de 85 CV.

Visualmente, el nuevo Logan ha logrado despegarse considerablemente del modelo precedente, resultando un producto atractivo por donde se lo mire. Con líneas que irradian robustez y volúmenes equilibrados, su diseño se destaca por haber incorporado el nuevo lenguaje estilístico de Renault, logrado a través de una parrilla que “copia” el formato del rombo.

Está acompañada por originales ópticas de diseño rectangular y un paragolpes que fue desarrollado específicamente en Brasil para los mercados de la región. Los laterales son los que también muestran la citada imagen que transmite robustez. En la versión full de la gama, está acompañado por espejos y manijas en color carrocería, y las llantas de aleación de 15 pulgadas, también con nuevo diseño.

Puertas adentro, el nuevo Logan dejó atrás todo lo conocido para contar con un panel de a bordo de nueva factura, e incorporando materiales de mejor calidad y en tonalidad bitono. La estrella del interior es el sistema Media Nav (las versiones más accesible, en su lugar, disponen de una radio doble Din), con pantalla táctil de 7 pulgadas, navegador, USB, Bluetooth, etc.

Como el modelo que le precede, el nuevo Logan se caracteriza por ofrecer un amplio espacio en su habitáculo, algo que se refleja en las plazas traseras, donde además dispone de un piso casi plano en la quinta plaza, que también incorporó quinto cinturón inercial.

La posición de manejo denota una postura alta, ya que aún en su posición más baja, el asiento queda demasiado elevado. Además, el volante regula en altura, pero no en profundidad, lo que limita las posibilidades de las personas más altas, a las que les quedan las piernas demasiado flexionadas.

Además, se destaca la suavidad del pedal de embrague, pero la dirección es demasiada “pesada”, y el selector de la caja manual –de cinco marchas- es algo impreciso. En síntesis, el nuevo Logan ofrece sensaciones de manejo similares a las del modelo de anterior generación, con el que comparte la generosa capacidad de baúl, que cuenta con 510 litros.  

Este es otro de los rubros en el que se ha mantenido la esencia del modelo original. Con suspensiones convencionales (tipo Mc Pherson adelante y semi-independiente atrás), ofrece una calibración preferentemente orientada al confort.

Esto se traduce en un paso suave por lomos o caminos en mal estado. En lo veloz, en cambio, acusa su intolerancia a los vientos laterales, muy presentes en la jornada de test drive, en las cercanías de la ciudad de Mar del Plata. Al momento de afrontar curvas, la carrocería mostró marcadas inclinaciones, aunque el inminente test drive será el momento propicio para evaluar con más detenimiento su dinámica.

El motor naftero 1.6/16v demostró, una vez más, ser un ejemplo de buen rendimiento. Acelera con determinación desde bajas rpm y se muestra progresivo hasta la zona alta del cuentavueltas. A pesar de que Renault ha comunicado que mejoró la insonorización, nuestra unidad acusó ruidos provenientes tanto del motor como del viento.

De esta forma, pasó brevemente por nuestras manos el nuevo Logan, un modelo que promete ocupar toda la franja del segmento B, y que para ello dispone de una gama tentadora con precios que van desde los 93.000 a los 119.000 pesos, y que agregó elementos distintivos, como sistema Media Nav con navegador satelital, limitador y regulador de velocidad, sistema de conducción ecológica, climatizador automático (una vía), sensor de estacionamiento trasero y doble airbag y ABS de serie en toda la gama. El Logan llegó para pelar la cima del segmento. ¿Podrá? Hagan sus apuestas.

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