Stellantis lanzó en Argentina la versión Big Horn de la Rampage, primera que incorpora la motorización diesel (las otras cuatro vienen con el 2.0 naftero de 272 CV y 400 Nm).

El nuevo motor es el 2.2 turbodiesel de 200 CV y 450 Nm, mismo que estrenó el grupo en la Fiat Titano (ver contacto). Lo acompaña una caja automática de nueve marchas (la Titano ofrece una de ocho) y tracción integral.

El equipamiento Big Horn es algo más reducido que el de las opciones disponibles en Argentina (Laramie, Rebel y R/T). Deja de lado las ayudas a la conducción, airbag de rodilla, butaca eléctrica y tapizado de cuero.

De serie, viene con seis airbags, climatizador bizona, cargador inalámbrico, pantalla táctil de 12″ con cámara, tablero digital, control crucero, acceso y arranque sin llave y llantas de 17″.

La capacidad de carga es de 1.015 litros, 265 más que en las opciones nafteras. Así, la Rampage se convierte, junto con la Toro, en la única pick up del segmento con motorización diésel, algo que no ofrecen Montana, Maverick u Oroch.

El precio es de 43.700 dólares (las nafteras cuestan entre 47.700 y 54.400). La garantía es de 3 años o 100.000 km.